La esquina de Laprida y España, en la localidad de Lomas de Zamora, fue el sitio donde a las 13 del miércoles pasado comenzó una concentración popular con radio abierta y volanteada incluida. El reclamo, era la destitución del comisario retirado Raúl Magallanes como consejero escolar, pero también un pedido para que no ejerza nunca más cargo político alguno y “que se investigue a fondo su actuación antes, durante y después de la dictadura, especialmente en su desempeño como funcionario policial a las órdenes de Camps y Etchecolatz y como subsecretario de Seguridad municipal del ex intendente Jorge Rossi”, denunciaron organizaciones de derechos humanos.
Algunas de las acusaciones por las que piden la inhibición de Magallanes para ejercer cargos públicos son: que durante la última dictadura se desempeñó como oficial de calle de la Bonaerense en Lomas de Zamora; que está vinculado con el caso Amia y con el caso Cabezas cuando integraba la denominada “maldita policía” de Eduardo Duhalde. Carga también con acusaciones de maltratos a manifestantes cuando era jefe de Seguridad del ex intendente de Lomas, Jorge Rossi. Y, por si no fuera suficiente, en los años de Rossi, designó como custodios del cuerpo de Seguridad municipal a Gerónimo Balmaceda, Juan Rivadeneira, Jorge Alberto Verdún y Manuel Moreno, cuatro policías denunciados ante la Conadep como represores.
“Nosotros venimos reclamando desde que supimos que iba a asumir y nos interiorizamos de quién era; pero por acá se lo conocía bien desde antes. Gladys Acosta, Mauro Céjas y Cacho Nuñez, hermanos de compañeros desaparecidos de Lomas, han dado testimonio de su accionar”, señaló a Miradas al Sur Rubén Ciuró, secretario administrativo de Suteba-Lomas e integrante de la agrupación Hacha y Tiza. Aunque adhirieron a la campaña personalidades como el Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel y Nora Cortiñas, trabajadores de la educación, organizaciones de la comunidad educativa, de derechos humanos, barriales y sindicales como ATE y CTA, Magallanes asumió en su cargo de consejero escolar el 21 de diciembre último.
“Raúl Magallanes me levantó una tarde de 1978, con un grupo de tareas que integraban junto con Ponce y Bustos, con dos Falcon verdes”, relató Sara Peretti, Madre de Plaza de Mayo. “Magallanes –contó– fue quien me esposó en la espalda, me tabicó y me llevó a la comisaría 1° de Lomas, donde me tuvieron en el patio hasta las cuatro de la mañana. De ahí me llevaron a La Tablada. El camino me lo conocía de memoria porque me habían dicho que a mi hijo lo tenían allí y desde hacía dos años había ido cientos de veces. Recién a la tarde, me hicieron subir una escalera, siempre tabicada y esposada, y me interrogó supuestamente un teniente coronel. Niego todo y me devolvieron a la comisaría de Banfield. Pero yo a Magallanes lo conocía bien porque lo había atendido seguido en el restaurante La Rueda, en los años ’75 y ’76, donde yo cocinaba y él era un jovencito que se metía en la cocina. Yo le servía las papas fritas.”
Sara no había contado esta historia, ni apareció su denuncia hasta que supo que Magallanes iba a asumir como presidente del Consejo Escolar. “Yo me despierto cuando me entero de que este señor va a entrar en el ministerio de Educación. Me digo que no puedo permitirlo y empecé a contar mi historia.”
Según pruebas difundidas en una conferencia de prensa realizada en la sede del Servicio de Paz y Justicia (Serpaj) que dirige Pérez Esquivel, en 1997, Magallanes fue investigado junto a 33 policías en el marco de la causa Amia, sospechados de ser “la red de apoyo al ex comisario Juan José Ribelli, acusado de haber sido pieza clave en el atentado contra la Amia”. Magallanes era, por entonces, titular de la comisaría de Los Hornos, en La Plata y ya había sido cuestionado por la Asociación de Comerciantes de Los Hornos por supuestas “irregularidades en la comisaría”.
Además, según un informe sobre el juicio oral confeccionado por la Asociación de Reporteros Gráficos de la Argentina (Argra) y el Centro de Estudios Legales y Sociales (Cels) por el asesinato del reportero gráfico José Luis Cabezas, Magallanes confeccionó “declaraciones falsas” durante la investigación de la banda de Los Horneros.
Ciuró señaló: “Exigimos al intendente de Lomas, Martín Insaurralde, que deje de ignorar los testimonios de los familiares de las víctimas de la represión y revea el aval político que da a Magallanes. Asímismo, exhortamos al cuerpo de consejeros escolares que lo votó para presidente, a que asuma una actitud de defensa de la política de Estado de derechos humanos por encima de cualquier acuerdo de distribución de poder y recursos y lo separe del cargo. Pero advertimos: si hace falta nos presentaremos con legisladores provinciales y nacionales, con el vicegobernador Gabriel Mariotto, con el gobernador Daniel Scioli y hasta con la Presidenta”. Ciuró recordó que en 2006 Mariotto señaló a Magallanes como “el López Rega de Rossi” y sentenció: “La lucha es para que ningún represor de la dictadura ocupe cargos públicos ni en Lomas ni en ningún otro lugar”.
Algunas de las acusaciones por las que piden la inhibición de Magallanes para ejercer cargos públicos son: que durante la última dictadura se desempeñó como oficial de calle de la Bonaerense en Lomas de Zamora; que está vinculado con el caso Amia y con el caso Cabezas cuando integraba la denominada “maldita policía” de Eduardo Duhalde. Carga también con acusaciones de maltratos a manifestantes cuando era jefe de Seguridad del ex intendente de Lomas, Jorge Rossi. Y, por si no fuera suficiente, en los años de Rossi, designó como custodios del cuerpo de Seguridad municipal a Gerónimo Balmaceda, Juan Rivadeneira, Jorge Alberto Verdún y Manuel Moreno, cuatro policías denunciados ante la Conadep como represores.
“Nosotros venimos reclamando desde que supimos que iba a asumir y nos interiorizamos de quién era; pero por acá se lo conocía bien desde antes. Gladys Acosta, Mauro Céjas y Cacho Nuñez, hermanos de compañeros desaparecidos de Lomas, han dado testimonio de su accionar”, señaló a Miradas al Sur Rubén Ciuró, secretario administrativo de Suteba-Lomas e integrante de la agrupación Hacha y Tiza. Aunque adhirieron a la campaña personalidades como el Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel y Nora Cortiñas, trabajadores de la educación, organizaciones de la comunidad educativa, de derechos humanos, barriales y sindicales como ATE y CTA, Magallanes asumió en su cargo de consejero escolar el 21 de diciembre último.
“Raúl Magallanes me levantó una tarde de 1978, con un grupo de tareas que integraban junto con Ponce y Bustos, con dos Falcon verdes”, relató Sara Peretti, Madre de Plaza de Mayo. “Magallanes –contó– fue quien me esposó en la espalda, me tabicó y me llevó a la comisaría 1° de Lomas, donde me tuvieron en el patio hasta las cuatro de la mañana. De ahí me llevaron a La Tablada. El camino me lo conocía de memoria porque me habían dicho que a mi hijo lo tenían allí y desde hacía dos años había ido cientos de veces. Recién a la tarde, me hicieron subir una escalera, siempre tabicada y esposada, y me interrogó supuestamente un teniente coronel. Niego todo y me devolvieron a la comisaría de Banfield. Pero yo a Magallanes lo conocía bien porque lo había atendido seguido en el restaurante La Rueda, en los años ’75 y ’76, donde yo cocinaba y él era un jovencito que se metía en la cocina. Yo le servía las papas fritas.”
Sara no había contado esta historia, ni apareció su denuncia hasta que supo que Magallanes iba a asumir como presidente del Consejo Escolar. “Yo me despierto cuando me entero de que este señor va a entrar en el ministerio de Educación. Me digo que no puedo permitirlo y empecé a contar mi historia.”
Según pruebas difundidas en una conferencia de prensa realizada en la sede del Servicio de Paz y Justicia (Serpaj) que dirige Pérez Esquivel, en 1997, Magallanes fue investigado junto a 33 policías en el marco de la causa Amia, sospechados de ser “la red de apoyo al ex comisario Juan José Ribelli, acusado de haber sido pieza clave en el atentado contra la Amia”. Magallanes era, por entonces, titular de la comisaría de Los Hornos, en La Plata y ya había sido cuestionado por la Asociación de Comerciantes de Los Hornos por supuestas “irregularidades en la comisaría”.
Además, según un informe sobre el juicio oral confeccionado por la Asociación de Reporteros Gráficos de la Argentina (Argra) y el Centro de Estudios Legales y Sociales (Cels) por el asesinato del reportero gráfico José Luis Cabezas, Magallanes confeccionó “declaraciones falsas” durante la investigación de la banda de Los Horneros.
Ciuró señaló: “Exigimos al intendente de Lomas, Martín Insaurralde, que deje de ignorar los testimonios de los familiares de las víctimas de la represión y revea el aval político que da a Magallanes. Asímismo, exhortamos al cuerpo de consejeros escolares que lo votó para presidente, a que asuma una actitud de defensa de la política de Estado de derechos humanos por encima de cualquier acuerdo de distribución de poder y recursos y lo separe del cargo. Pero advertimos: si hace falta nos presentaremos con legisladores provinciales y nacionales, con el vicegobernador Gabriel Mariotto, con el gobernador Daniel Scioli y hasta con la Presidenta”. Ciuró recordó que en 2006 Mariotto señaló a Magallanes como “el López Rega de Rossi” y sentenció: “La lucha es para que ningún represor de la dictadura ocupe cargos públicos ni en Lomas ni en ningún otro lugar”.
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